Toni Doblas, Parra, Gallardo, Jordi, David Sánchez, Antonio y Cheli. Siete jugadores de gran nivel, con pasado en Primera y con otro detalle en común. Todos han entrenado esta temporada en las filas del San Roque de Lepe.
Y resulta curioso que alguno de ellos rozó con los dedos de la mano la posibilidad de formar parte del conjunto aurinegro, aunque otros desestimaron la ‘oferta’ de recalar en Lepe.
Paco Gallardo ha sido el que más cerca ha estado de llegar al cuadro de Ceballos. Hasta el último segundo se especuló con su incorporación que quedó en punto muerto ante una más que posible salida al fútbol extranjero. No surgió y se quedó sin equipo, aunque él sigue ejercitándose con el cuadro onubense en Gines.
Por su parte, Cheli y Doblas fueron los primeros en desestimar un posible fichaje por el San Roque. El primero buscaba un equipo de Segunda para seguir jugando, aunque finalmente acabó en Segunda B (Lleida). Mientras, Doblas que sólo se comprometió para entrenar (como la totalidad de los jugadores de primer nivel que entrenan con el equipo aurinegro), se marchó al Aris de Salónica griego el pasado 8 de septiembre.
Antonio, ex central del Numancia y el año pasado en el Lucentino, también ha desarrollado buena parte de la pretemporada con el conjunto aurinegro con la intención de ponerse a prueba. Con esos jugadores, el San Roque tendría una plantilla espectacular, pero aún queda lo mejor para construir un equipo que podría competir con el resto en Segunda División A.
Parra, Jordi y David Sánchez. Tres jugadores con magia. El primero procede del Albacete y es un mediocentro organizador de mucha calidad. Jordi, ex del Córdoba, Xerez o Zaragoza es uno de los delanteros más contrastados de la Segunda, mientras que David Sánchez tiene clase a raudales y pocos se explican cómo puede seguir sin encontrar equipo.
POsibilidades. Con todo ello, y aunque sólo se trate de un sueño, Ceballos podría confeccionar un once tremendamente espectacular. Isaac, Alfonso, Antonio, Hornillos, Vidal, Cheli, Parra, David Sánchez, Gallardo, Añete y Joaquín. Para las posibles sustituciones, Isaac, Servando, Juanlu, Chema, Cisco, Juan Villar, Vicente, Nando, Navarro, Joaquín, Berro, Jonathan, Lebrón, Chapi o Raúl. Lástima, que haya que tener seis jugadores sub 23 –algo inviable con esta plantilla–.
Sólo pensar en un equipo de este tamaño pone los pelos de punta, porque sin siete jugadores de superior categoría, el San Roque ha iniciado la temporada con las pilas puestas y con ganas de seguir creciendo. ¿Objetivo? Habría que ver qué ocurriría, pero con esa plantilla el ascenso se transformaría en una meta cercana e incluso obligada, porque no hay que olvidar que jugadores del nivel de Juan Villar ya saben lo que es jugar en Primera División. Y que nadie se olvide del mago Añete. Un ojeador del Real Madrid se desplazó el pasado fin de semana para ver el San Roque-Murcia y todo apunta a que los observados eran tanto Villar como Añete. Pero, ¿soñar es gratis no? Con el uno, Doblas, con el 22 Alfonso...
Y resulta curioso que alguno de ellos rozó con los dedos de la mano la posibilidad de formar parte del conjunto aurinegro, aunque otros desestimaron la ‘oferta’ de recalar en Lepe.
Paco Gallardo ha sido el que más cerca ha estado de llegar al cuadro de Ceballos. Hasta el último segundo se especuló con su incorporación que quedó en punto muerto ante una más que posible salida al fútbol extranjero. No surgió y se quedó sin equipo, aunque él sigue ejercitándose con el cuadro onubense en Gines.
Por su parte, Cheli y Doblas fueron los primeros en desestimar un posible fichaje por el San Roque. El primero buscaba un equipo de Segunda para seguir jugando, aunque finalmente acabó en Segunda B (Lleida). Mientras, Doblas que sólo se comprometió para entrenar (como la totalidad de los jugadores de primer nivel que entrenan con el equipo aurinegro), se marchó al Aris de Salónica griego el pasado 8 de septiembre.
Antonio, ex central del Numancia y el año pasado en el Lucentino, también ha desarrollado buena parte de la pretemporada con el conjunto aurinegro con la intención de ponerse a prueba. Con esos jugadores, el San Roque tendría una plantilla espectacular, pero aún queda lo mejor para construir un equipo que podría competir con el resto en Segunda División A.
Parra, Jordi y David Sánchez. Tres jugadores con magia. El primero procede del Albacete y es un mediocentro organizador de mucha calidad. Jordi, ex del Córdoba, Xerez o Zaragoza es uno de los delanteros más contrastados de la Segunda, mientras que David Sánchez tiene clase a raudales y pocos se explican cómo puede seguir sin encontrar equipo.
POsibilidades. Con todo ello, y aunque sólo se trate de un sueño, Ceballos podría confeccionar un once tremendamente espectacular. Isaac, Alfonso, Antonio, Hornillos, Vidal, Cheli, Parra, David Sánchez, Gallardo, Añete y Joaquín. Para las posibles sustituciones, Isaac, Servando, Juanlu, Chema, Cisco, Juan Villar, Vicente, Nando, Navarro, Joaquín, Berro, Jonathan, Lebrón, Chapi o Raúl. Lástima, que haya que tener seis jugadores sub 23 –algo inviable con esta plantilla–.
Sólo pensar en un equipo de este tamaño pone los pelos de punta, porque sin siete jugadores de superior categoría, el San Roque ha iniciado la temporada con las pilas puestas y con ganas de seguir creciendo. ¿Objetivo? Habría que ver qué ocurriría, pero con esa plantilla el ascenso se transformaría en una meta cercana e incluso obligada, porque no hay que olvidar que jugadores del nivel de Juan Villar ya saben lo que es jugar en Primera División. Y que nadie se olvide del mago Añete. Un ojeador del Real Madrid se desplazó el pasado fin de semana para ver el San Roque-Murcia y todo apunta a que los observados eran tanto Villar como Añete. Pero, ¿soñar es gratis no? Con el uno, Doblas, con el 22 Alfonso...
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